Por Marcos Taboada.
El artista presenta su álbum en el Auditorio Nacional del Sodre el 10 de octubre, con un repertorio de 11 canciones.
Teniendo diversidad en los paisajes sonoros y con una instrumentación orgánica mezclado con un sonido moderno y digital, que transita mayoritariamente en el electro-rock.
Hablamos con él para que nos cuente un poco más sobre este nuevo proyecto.
¿Cómo definirías tu música?
En cuanto a género, el Synthpop es el estilo base del proyecto desde los inicios, moviéndose por el electrorock, new wave, ambient, indiedance y últimamente campos más acústicos. Me gusta definirlo hoy como Dreampop, porque habla de una sonoridad que nace de capas melódicas vocales, de paisajes instrumentales y tonales emotivos, que son los pilares de lo que siempre he hecho. En la fusión de texturas y melodías se genera una experiencia similar a un sueño, donde no son tan claros los límites de lo que está sucediendo, pero hay una sensación más amplia que es lo que me gusta trasmitir, ese espacio de riqueza sonora y emocional.
¿Qué canción te gusta más de este álbum?
Me encanta esta pregunta porque aún no me la han hecho. Uno se enamora de cada una de las canciones en diferentes momentos, pero la experiencia de creación de “Donde la duna va” fue muy mágico, profundo y trascendental, en un retiro personal en Piriápolis. Por eso creo que la elegiría. “Lazos” es la fundadora del disco y de gran importancia, y también me gusta mucho “Te acerca más”, y…y…y…
¿Este nuevo proyecto está inspirado en música de los 80?
Definitivamente. Yo nací en 1980 así que es la música que más me marcó en mi vida, lo que escuchaba de chico. Más allá que mis primeras bandas de adolescente fueron hardcore, y me gusta música de muchos estilos, los 80 tiene algo especial, esa nostalgia y sonoridad con la que resueno internamente y a la que de alguna manera, siempre termino volviendo. Creo que el britpop de los 90 s es lo que le sigue en influencia y que siento que también marcó mucho lo que hago.
¿Qué artistas de esa época tuvieron más influencia en vos?
Creo que el primer casete con el que me colgué fue “Corazones” de Los Prisioneros, una banda punk chilena que sacó ese año un disco más technopop; me lo trajeron mis primos chilenos cuando recién salió. Pero las bandas de esa época que más representan una influencia para mí son Depeche Mode, The Smiths, Ultravox, Dead Can Dance, Virus, OMD, Human League, Pet Shop Boys, Duran Duran, Visage, New Order…
¿Qué significa este álbum para tu carrera?
Es de gran importancia en varios aspectos. Por un lado significa haber llegado a una sonoridad que siento estaba buscando hace años, que me representa más ampliamente y de la que estoy muy satisfecho. A la vez fue la primera vez que me expresé de forma audiovisual, que fue un paso que me costó realizar antes. Y por último, representa el momento de más confianza en mi vida, en el que decido dedicarme a esto.
¿En qué sentido tu música es visualmente cinematográfica?
Siempre imagino mis canciones de forma cinematográfica, por ser amante del cine y de lo visual, que siempre ha sido parte importante del proyecto. Digo a menudo que tengo una filmografía no realizada de mis canciones. Hasta que un día, lo hice, se abrió el paracaídas y me tiré a la aventura de la realización. Empecé con material de archivo en el videoclip de “Lazos”, luego material de cine para “Gibraltar”, y la ficción en “Monte Nogal” y “Contraviento” (este último nominado a mejor videoclip en el festival Detour). Luego de haberlos hecho, de vivir la experiencia como realizador en varios aspectos del proceso, me pregunto ¿Cómo no lo hice antes? Ahora se abrió la compuerta…
¿Cuáles son tus expectativas para este show?
Presentar este disco, que es también el debut de la banda en vivo, en una sala tan soñada como la Hugo Balzo, es un punto alto para mí y un momento muy importante, por lo que vengo trabajando mucho para que sea una noche realmente especial.
¿Algo que le quieras decir al público que te va a ver?
A los que ya me conocen, va a ser una evolución de lo que he hecho hasta ahora, pero 100% Cacciatore en su esencia. A los que aún no han tenido la oportunidad, será una propuesta distinta, con puesta en escena, calidad sonora y visual que los hará despertar, soñar, bailar y tocará sus corazones. Apréndanse los estribillos. ¡Nos vemos ahí!