Por Valentina Viettro.
Con tela para rato.
Marginal es el nombre del primer disco de Batimento Dúo, un grupo instrumental de guitarra integrado por Ignacio Correa y Andrés Rey que contó con el apoyo de FONAM. Desde su carátula vemos como trama y urdimbre se sueltan de las prendas intentando formar algo más grande. ¿Una bandera que atraviese el mundo? ¿La vela de un barco suelto en el mar? ¿Una camiseta que brille de una frontera a la otra?
Cómo en tantos otros rubros, la condición de país chico ha llevado a los nuestros a llenarse de ingenio para defender sus ideas con aspaviento. En este caso para que se oiga, che Papusa, que se baile y se sepa que el tango uruguayo existe, tiene su historia, vive y colea entre los dedos de la juventud. Este embanderamiento no parece costarle mayor esfuerzo a Ignacio y Andrés, que con su dúo Batimento, defienden con hidalguía a tangos y milongas nacionales embellecidas con sus propios arreglos que ya sobrepasan las fronteras del país.
Recién vueltos a casa sin engrupirse, luego de una gira que incluyó destinos poco explorados, como el festival de la guitarra en Bolivia, diversas milongas en Finlandia y un evento oficial para la embajada uruguaya en Inglaterra. Y que les permitió presentar su música ante públicos más o menos cautivos, en espacios muchas veces dedicados al rock o al jazz. Ya vueltos al país, las ruedas no se detuvieron y los escenarios se sucedieron con una gira nacional que fue posible gracias a los Fondos Concursables del MEC.
En este momento, este dúo de inquietos pebetes prepara sus próximos movimientos, que implican el festival Sonamos Latinoamérica en Argentina y un showcase apoyado por el Instituto de Música en la feria Circulart en Colombia donde el tango, el vals, la milonga y el candombe serán su tarjeta de presentación y la forma de cerrar un año rico de propuestas y paisajes.
El trabajo de difusión y musicología que realiza Batimento dúo, permite revalorizar las composiciones de los tangueros uruguayos como Alberto Mastra, Matos Rodriguez, D’Arienzo, José María Aguilar, Julio Sosa y Arturo Senes. Y renovar esa relación de privilegio que ha tenido desde siempre la música nacional con el sonido de la guitarra, una práctica que llega al papel y se hace libro gracias al apoyo de la Comisión Interministerial de Apoyo al Tango y el Candombe (CIATYC) integrada por el Ministerio de Educación y Cultura, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Ministerio de Turismo que permitió la impresión de un trabajo que difunde y actualiza parte del patrimonio tanguero del Uruguay.
Conversando con Andrés Rey, cuenta que tanto él como su compañero de escena, crecieron escuchando la música popular nacional, pero se decidieron por el tango luego de haber pasado por el estudio académico de la música. El tango les pareció que era el punto exacto que reunía a las raíces criollas con las costumbres regionales. Una manera de reivindicar la creación de los músicos de antes y estirar las manos para saludar a los colegas de la región.
Y mientras esperamos al mecánico, medimos tornillos, vivimos de prepo, apoliyamos apuraos y con el oído pegao al riel esperamos las buenas nuevas, les dejamos algunos links que muestran que estos dos tienen tela para rato.
Sitio web: https://batimentoduo.wixsite.com/batimentoduotango/galeria
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